"Lograr el Amor en la Pareja"
Para “Lograr el Amor en la Pareja” en primera instancia debemos mirar a “el respeto” entre los miembros de la pareja..
Respetar significa ver como adecuado, ver a ello tal y como es, a su destino y sus fidelidades familiares.
Respetamos a nuestra pareja cuando somos capaces de decirle: “Te quiero y te Respeto a ti y a tu sistema, tus costumbres, tu país, tu cultura, tus valores, tu pasado y tu destino. En ti quiero y Respeto a tu madre y padre. Quiero y Respeto lo que te guía y lo que me guía. Tal y como eres, eres perfecta/o para mí”.
Querer re-educar o cambiar a nuestra pareja como si se tratara de un niño/a, es no respetarle tal y como es. Y cuando se rechaza a uno o ambos padres de la pareja, también se está rechazando a la pareja.
Entre las partes de una relación la relación, ambos dan lo que tienen y toman lo que les falta, pero quien no toma a sus padres, no podrá pasar mucho a su pareja ya que permanece estancado en sí mismo, sigue siendo como un niño y no puede desarrollarse como adulto.
Ganamos libertad en la pareja cuando no hacemos depender nuestra felicidad de ella, sino que tomamos las riendas de nuestra vida. En muchos casos la pareja se torna obstinada/o en la manera de querer ser amada/o aquí es donde la relación comienza a tomar distancia, aquí la pareja no ve el potencial de la otra/o, aquí está buscando el amor de madre y no está abierto a una relación de igual a igual.
También es importante ocupar el lugar que nos corresponde, con respecto a nuestro sistema familiar, ya que el amor sólo llena lo que el orden abarca. Hay muchos hijos que ocupan el lugar de mamá o papá, entonces se castigarán fracasando en el amor o escogiendo a parejas que también estén en la posición de “hijo parental” y no están disponibles para una relación de pareja de igual a igual.
Cuando ocupamos nuestro lugar, nos sentimos ubicados, con buen nivel energético, en paz, con confianza y preparados para entregarnos a nuestra pareja desde el respeto.
Además, es necesario, reconocer, respetar y dar un lugar a todas las parejas que han pasado por nuestra vida, si no es así uno no está disponible emocionalmente para "lo nuevo". Como también respetar y agradecer a las anteriores parejas de la actual, porque no serian lo que son hoy sin la adquisición de aquellas experiencias.
Una buena separación se logra cuando los compañeros mutuamente se dicen: “Te quise mucho. Todo lo que te di, lo di con ganas. Gracias por lo que me diste. Por aquello que entre nosotros fue mal, yo asumo mi parte de responsabilidad y dejo la tuya contigo. Te llevo siempre en mi corazón. “Estás libre y estoy libre” Tomando con amor aquello que nos aportaron las parejas que tuvimos en el pasado, podemos aportar el aprendizaje a la siguiente relación. Si no es así, existirá dificultad para unirse, de nuevo, a otra relación. Es decir, la despedida se logra, cuando tomo todo lo que una persona me da con gratitud.
Dedico esto en profunda gratitud y respeto a mis parejas.
